El yacimiento de La Huelga se encuentra enclavado en una de las terrazas inferiores del Valle del Bajo Pisuerga, junto al cauce de un antiguo meandro, aspecto sin duda determinante en la ubicación de este poblado prehistórico. Desde su descubrimiento, en mayo de 1991, con motivo de trabajos de extracción de áridos que se estaban llevando a cabo en la zona, han sido varias las intervenciones arqueológicas de urgencia realizadas.
Su gran extensión territorial, no menor de 28 Ha, y su prolongada ocupación, constatándose restos de mundo campaniforme, muy probablemente dentro de un contexto de bronce antiguo, pasando por las fases de desarrollo de la cultura de Cogotas I, tanto en su momento formativo, como de su plenitud, con cerámicas decoradas con excisión y boquique terminando, con restos medievales en zonas muy limitadas; posibilitan el estudio sobre un mismo enclave, de la evolución crono-cultural, a lo largo de un amplio periodo temporal de la Prehistoria reciente.
La necrópolis tiene 156 sepulcros individuales, dobles y de niños, posiblemente medievales, de entre los siglos XII y XIV. No se encontraron ajuares funerarios, únicamente los individuos colocados boca arriba en sus nichos y con los brazos sobre el cuerpo. |