Dice la leyenda que muy cerca del Santuario de Santa Mariña de Augas Santas existió una villa romana conocida como Armea, topónimo que se ha conservado hasta el día de hoy en forma de la pequeña población que heredó el nombre. Aparte del santuario, encontramos diversos petroglifos, un castro, penedos lengendarios, pilas seculares, una basílica románica inacabada que contiene una cripta templaria bajo su suelo en el cual podría haber los restos de una Pedra Formosa o lo que es lo mismo un horno prerromano. Todos estos elementos históricos se encuentran relacionados con la leyenda de Santa Mariña. Además hace poco se descubrió muy cerca los restos de otra posible villa romana o bien un santuario que presenta escalones en la roca donde se asienta en un lugar conocido como Monte do Señoriño.
Además de los restos de la villa romana conocida como Castro da Atalia de Armea existe un castro en las inmediaciones, el castro de A Cidade do Monte das Muradellas ou dos Pendóns. Este antiguo castro se situaba en la parte más alta, en los curutos de Outeiro dos Pendóns y Outeiro dos Fornos, En la ladera noreste se sitúan los restos de la villa romanizada que presenta ya calles pavimentadas, red de saneamiento, canales de evacuación de agua, casas de dos pisos, pórticos y sus edificaciones presentan una buena sillería. Estamos ante un poblado galaico-romano ya enteramente romanizado y que probablemente fue habitado hasta el siglo IV. En la zona que se denomina A Atalaia es donde se localiza este recinto romanizado. Desde aquí se obtienen unas fantásticas vistas del Val da Rábeda y de las proximidades de Ourense, en donde existe otro asentamiento romanizado conocido como Santomé que se sitúa a solo 11 km en línea recta y que seguramente convivió en la época de este de Armea.
El recinto castrexo primitivo ocupa una extensión de 4,8 Ha y tiene unas dimensiones de 357 m en su eje N-S y de 169 metros de E-O. Se encontraba rodeado por una muralla de unos 3 o 4 metros en su origen. El yacimiento se encuentra muy alterado debido a la proximidad de viviendas y numerosas fincas que presentan muros de mampostería que aprovecharon muchos de los sillares y piedras de las construcciones originales.
Las primeras excavaciones del Castro da Atalaia fueron realizadas en 1957 dirigidas por Francisco Conde-Valvis. En el año 2011 la zona volvió a ser objeto de otra excavación. Uno de los objetos más representativos que se encontraron en Armea fue el conocido como "O guerreiro alaricano" que es un raspador para pieles en donde aparece un dibujo de una figura antropomorfa con el pelo encrespado y con un arma en cada mano. |