En pleno Parque Natural Baixa Lima-Serra do Xurés, se conservan grandes tramos de la Vía Nova o vía romana XVIII. Su recorrido de 215 millas romanas (unos 318 km), uniendo las poblaciones de Bracara Augusta (Braga-Portugal) y Asturica Augusta (Astorga), se encuentra señalizado mediante miliarios (o piedras miliares). Este itinerario es uno de los que conserva el mayor número de miliarios de toda Europa.

En esta vía se situaban, a lo largo de la calzada, una serie de villas romanas que nos daban una idea del nivel de vida del imperio romano. Estas mansiones surgirían por el enorme tránsito de esta calzada, que era de las pocas vías de comunicación que unían varias regiones y por lo tanto facilitarían el comercio de materias primas tales como el oro, que provenían de lugares como las Médulas, en provincia de León.

Se trata de un edificio de reposo, situado a escasos metros del curso fluvial del río Caldo, muy próximo al nuevo balneario. Lugar elegido por la existencia de aguas termales, como las localizadas en los baños junto al balneario, que brotan del lecho fluvial a una sorprendente temperatura (entre los 55 y 77 grados).

Los restos de la villa, datada entre los siglos I y IV d.C., están formados por varias dependencias entre las que destaca una vivienda de clase alta, que disponía de una tecnología peculiar para regular la temperatura interior, el denominado hipocausto.

Es posible que el nombre de Aquis Originis sea debido a que justo allí emanaban las aguas calientes, ya que no provenían de ningún manantial próximo y no era necesario un sistema de canalización. Es probable que date del Alto Imperio pero con posibles reformas en el Bajo Imperio. Por lo tanto, comprendería los siglos II a.C. hasta el IV d.C. Hoy es posible observar la presencia de las canalizaciones de agua caliente de debajo de la casa, así como un horno y diversas estancias distribuidas a lo largo de la mansión.

En el 2008 se han producido diversos hallazgos de tejas en fincas cercanas que haría más grande el recinto y que podría llegar hasta casi el moderno balneario que se encuentra justo al lado de los Baños públicos del Río Caldo.

En el lugar se encontraron diversas piezas, como monedas y otros objetos de oro y mármol.