LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

VALERIA

Las ruinas de la ciudad romana de Valeria son un importante yacimiento romano situado en torno de la Hoz del río Gritos en el municipio de Las Valeras en Cuenca. Fue fundada entre el 93 y 82 a.C. sobre terrenos conquistados en la centuria anterior a los pueblos celtas que habitaban la zona. Los restos que se muestran en la actualidad y las menciones escritas indican que fue un municipium importante, la mayor parte de estos restos han sido visibles desde siempre, en especial el edificio más característico: el ninfeo. Desde su fundación siempre ha conservado el topónimo romano que hace referencia a su fundador, Cayo Valerio Flaco.

Anteriormente era una zona de pobladores celtíberos y olcades, el área es conquistada en 179 a.C. La nueva ciudad romana no sustituye a un núcleo indígena importante sino que corresponde a una política de creación de urbes con la estructura al uso. Estaba comunicada por medio de ramales secundarios con la vía de Complutum a Cartago Nova y con Ercávica y Segóbriga.

La ciudad en época romana contaba con un perfecto aprovisionamiento de aguas, mediante un articulado sistema de acueductos adaptados o excavados en la roca que vertían en numerosos aljibes y fuentes monumentales de las que se conservan numerosos vestigios como el ninfeo, una fuente monumental de carácter ornamental con dependencias construidas a uno de sus costados, talleres y pequeñas tiendas. Contaba también con una basílica, edificio civil, donde se realizaban transacciones mercantiles y bursátiles, y un foro de época augústea, edificado con solidez y envergadura, y cuatro aljibes que daban suministro de agua a la ciudad.

Las casas de la ciudad son de dos tipos, unas rectangulares apoyadas en terrazas, y otras llamadas casas colgadas, con huecos abiertos al acantilado que limitaba la ciudad por uno de sus lados, con vigas encastradas en la roca que dejaban la mitad de la vivienda suspendida en el vacío. El recinto amurallado que daba cabida a la ciudad tenía una extensión de 27 Ha. Este gran tamaño indicaría que la mayor parte de los habitantes vivían dentro de dicho recinto.

Sin duda la gran época de Valeria, en cuanto a su desarrollo urbano, corresponde al siglo I, cuando se acometió la construcción del foro. El conjunto foral se ubica en el centro del yacimiento y lo integran una serie de edificios públicos articulados a distintas alturas en torno a una gran plataforma donde se ubicaba la plaza del foro y, soterrados en la propia plataforma, se encuentran los aljibes. Al norte se localiza el edificio de la basílica, en el costado oeste el edificio prebasilical o domus publica, el edificio de la exedra (aula de culto imperial) y el criptopórtico. Al sur se sitúa una gran escalera monumental de acceso a la plaza y una serie de tabernas (tiendas) y al este se encuentra el edificio emblemático de Valeria, el ninfeo (fuente monumental) y sus tabernas delanteras. Todo este conjunto se encuentra delimitado por calles.

En las proximidades del foro se localizan las estructuras de la zona meridional, la casa de Adobe. También se cuentan otros ejemplos de urbanismo privado como son la casa del Hoyo y la casa Colgada, antecedente en época romana de las viviendas medievales de Cuenca.

Por último, hay que mencionar, ya de época medieval, la muralla y la ermita de Santa Catalina y su necrópolis.