LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

LAS TOSCAS DEL GUIRRE

La Gomera posee el mayor texto líbico bereber descubierto en Canarias denominado el yacimiento Las Toscas del Guirre. con una cantidad llamativa de signos, 105 grabados del alfabeto líbico bereber en un enclave relativamente bien conservado y ubicado en un paraje natural muy poco modificado.

En el entorno se aprecian con claridad cazoletas y otros signos de la presencia humana que hablan de la importancia que un día tuvo el lugar y, en consecuencia, tiene hoy para el estudio de las sociedades prehispánicas. Se indica también que la cueva que alberga todos estos restos tiene un fondo arenoso, que aventura la existencia de indicios arqueológicos sin descubrir.

Un estudio fundamentado en posición Astronómica revela la conexión del yacimiento arqueológico de las Toscas del Guirre con el roque de Agando, mediante las estrellas Conopo y Sirio. El hallazgo del panel con caracteres de escritura libico-bereber en una pequeña cueva en la ladera de un barranco, donde también hay una pequeña concentración de cuevas de habitación y sepulcrales, hizo posible esté descubrimiento.

El panel de grabados rupestres se encuentra en la pared del fondo de la cueva, en una superficie aproximada de 2 metros de largo y 1,30 de altura. En el extremo oeste de la cueva, en el techo, existe un agujero de unos 16 centímetros de diámetro, y tanto en el interior de la cueva como en el exterior hay un buen número de cazoletas, excavadas en las rocas.

Los soportes donde se grabaron los caracteres se direccionan hacia el lugar donde sucede la alineación de las estrellas Conopo y Sirio frente a la misma cueva, por otra parte por la orientación del agujero del techo se puede prestar atención como la estrella Sirio se oculta por detrás del roque de Agando.

La observación y culto a la estrella Conopo se encuentra bien documentada en el mundo bereber, como la estrella principal del cielo. Según este estudio los habitantes de La Gomera realizaban una especie de culto entre el cielo, estrellas Conopo y Sirio, y la Tierra, las Toscas del Guirre y el roque Agando.

También en el solsticio de invierno en la puesta de sol por el agujero del techo, penetra un rayo que recorre todo el fondo de la cueva donde está el panel de grabados, y se deposita en una cazoleta excavada en la roca, expresamente para recogerlo, un marcador solsticial. El rayo de Sol desaparece de la cazoleta en el momento exacto que muere el día.