LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

TOLMO DE MINATEDA

El Tolmo de Minateda es un yacimiento arqueológico en Hellín (Albacete). Dominaba el paso de la zona costera del sureste al interior de la Meseta, accesible a través de la vía romana Complutum—Carthago Nova, Carthago Spartaria—Toletum en época medieval. Un ramal de este camino, con profundos surcos labrados por las ruedas de los carros, conducía al interior de la ciudad.

Hasta la fecha, la ocupación más antigua que se ha constatado pertenece a la Edad de Bronce y se trataba de un enterramiento, una fosa común para los muertos, un cementerio de aquella época. Durante la civilización íbera, se siguen realizando en este lugar túmulos y monumentos funerarios; así como una estructura de muralla realizada en mampostería.

A la entrada del yacimiento las excavaciones han puesto al descubierto tres estructuras defensivas. La más antigua es de los siglos II - I a.C., de forma ataludada y construida con mampostería, aunque en su interior existen vestigios que se remontan a la Edad del Bronce. En época augustea se la revistió de un muro de sillería para conmemorar la concesión a la ciudad del estatuto municipal, seguramente con el nombre de Ilunum. Algunos sillares con inscripción monumental nos han permitido conocer que esta obra se hizo en el año 9 / 8 a.C., bajo los auspicios del emperador Augusto y la intervención más o menos directa de su sobrino Lucio Domicio Ahenobarbo, gobernador de la provincia.

En el siglo VI d.C. los restos de este muro se utilizaron en la construcción de un baluarte adelantado en forma de L, con puerta abovedada flanqueada por dos torres. Debió arruinarse pronto, quizás a causa de un movimiento sísmico. Su ángulo septentrional se desmoronó sobre el camino, inutilizándolo.

En la parte alta del yacimiento se ha excavado en los últimos años un importante complejo religioso y palacial de época visigoda. El edificio principal es una basílica de tres naves separadas por columnas, con ábside en la cabecera y baptisterio también tripartito a sus pies. Adosado a su lado norte, un edificio de grandes dimensiones y estructura monumental parece tener funciones de representación, administración y residencia. Es posible que se trate del palacio de la sede de Elo o Eio, creada entre los años 589 y 610 para administrar la parte de la diócesis de Ilici que permanecía en manos visigodas, puesto que el resto estaba en poder de Bizancio. Alrededor del complejo se extendía un cementerio con numerosas inhumaciones, enterramientos reservados a las élites laicas y religiosas, que buscaban la protección de las reliquias de la iglesia.

Tras la llegada de los musulmanes, la ciudad es una de las que se incluyen en el pacto firmado en el año 713 entre el comes o dux Teodomiro y el conquistador Abd al-Aziz ibn Musa. Mantuvo su existencia durante casi doscientos años, aunque la iglesia debió perder pronto su carácter religioso. Su lugar lo ocupó un barrio islámico, hasta que a finales del siglo IX la ciudad se abandonó de manera definitiva. Desde entonces el lugar se conoció como Madinat Iyyuh, nombre del que procede la Minateda actual.