LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

SANTUARIO IBÉRICO DE CHORRILLO

El yacimiento arqueológico de Chorrillo se encuentra en un cerro de poca altura junto al río Vinalopó, dos kilómetros al norte del importante poblado ibero de El Monastil. El límite municipal Elda-Petrer pasa por el medio del yacimiento.

El cerro se encuentra a 440 m. de altura sobre el nivel del mar y a tan sólo una veintena de metros sobre las tierras de alrededor. El yacimiento debería ser consolidado para su mejor conservación, ya que los restos estructurales son escasos y la intemperie los está perjudicando, además la vegetación está enraizando en las estructuras provocando su deterioro.

En lo alto del cerro se conservan los restos de un edificio singular dentro de la arquitectura ibérica. El edificio mide 9,3 metros de largo por 11 de ancho, tiene forma rectangular y se aprecia una división en tres habitaciones. Pero lo que más destaca de los restos conservados es uno de los muros que alcanza los 80 centímetros de grosor y que es lo más visible del yacimiento. A pocos metros de este muro había dos cubetas excavadas en la roca. Todavía se pueden apreciar restos de una de ellas. Tiene tan sólo 6 cm. de profundidad. En las excavaciones arqueológicas se hallaron restos de tres grandes hogueras, una de ellas junto al gran muro.

En el yacimiento se encontraron varios agujeros. La mayoría debieron ser usados para emplazar postes que formaban parte de la estructura arquitectónica del edificio. Esta manera de construir, combinando piedra, adobe y postes es única dentro de la cultura ibérica de la Contestania. Uno de estos agujeros para postes se puede apreciar perfectamente en una de las rocas que componen el gran muro. Pero seguramente otros de los agujeros que encontraron los excavadores y que hoy son difíciles de ver fueron utilizados de manera ritual ya que se encontró cerámica rota en su interior, probablemente producto de algún ritual desconocido.

Entre la cerámica encontrada en el yacimiento se encontró cerámica griega de barniz negro, cerámica fenicio-púnica y también un vaso caliciforme. Está perfectamente documentado que los vasos caliciformes se usaban en los rituales ibéricos.