El descubrimiento más notable en relación con la ciudad de Andelos es su sistema de abastecimiento de aguas. Es excepcional el hallazgo y conservación de esta obra hidráulica que comprende desde la captación hasta el centro de distribución en la ciudad.
Situada en el límite de los municipios de Mendigorría y Cirauqui, la presa de Iturranduz recibe el nombre popular de "Puente del Diablo". La excavación ha dejado al descubierto los restos de dos obras de contención realizadas en épocas sucesivas. La primera es una construcción de sillarejo, con trece contrafuertes interiores y una arqueta de salida de agua. La longitud total es de 150 metros. Se ejecutó en el siglo I d.C.
Su deficiente impermeabilidad hizo necesaria su sustitución por una pantalla de hormigón (opus cimenticiae) reforzada con nueve contrafuertes al exterior. Tiene una longitud de 102 metros y apoya sus estribos en la roca. Su fecha de construcción puede corresponder a principios de siglo II d.C.
El depósito regulador ocupa un amplio espacio excavado en el terreno de 85 x 37 metros como ejes máximos, con una capacidad de almacenamiento de 7.000 metros cúbicos. En su construcción hay dos fases. En la primera el depósito era de dimensiones más reducidas y las paredes y suelos estaban impermeabilizadas con un revestimiento de argamasa hidráulica. En una segunda fase se realizó una ampliación que reforzó los muros con 37 contrafuertes interiores con el fin de aguantar el empuje de la tierra a depósito vacío. A esta segunda obra corresponde la arqueta de salida de agua y la escalera de bajada al interior.
En el muro Este del depósito de ha descubierto una arqueta que da paso a la cámara de llaves que controlaba la salida de agua al inicio del acueducto. La vaguada existente y la diferencia de nivel entre el depósito y la ciudad hizo necesaria la construcción de un acueducto, con un canal de piedra, specus, por el que circulaba el agua a presión a través de una tubería de plomo y un sistema de sifón.
El Castellum Aquae es la construcción donde finaliza la conducción y comienza la red de distribución de agua por la cuidad. Este tipo de depósitos servían para repartir y dividir el caudal. De este edificio se conserva un podio rectangular de grandes sillares acabado en otros moldurados. El interior está compuesto de un relleno de piedra picada y sobre ella una fuerte argamasa formada por tres capas. Sobre el podio se levantaría la cámara superior o depósito que estaría cubierta por bóveda de cañón o arista. En el paramento situado al Este hay una serie de acanaladuras en todos los sillares que pudieran significar la existencia en esta parte del edificio de una fuente pública y quizá un ninfeo. |