S′Hospitalet Vell se encuentra muy cerca de una de las zonas más turísticas de Mallorca, Cales de Mallorca, al sur del municipio de Manacor. El yacimiento se encuentra en un espacio donde parece haberse parado el tiempo. Se encuentra rodeado de campos de cereales, algarrobos y rebaños de ovejas.
El yacimiento comprende un extenso periodo de tiempo, distribuido en tres grandes zonas. Lo interesante de S′Hospitalet Vell es que reúne dos grandes épocas de la prehistoria mallorquina, la edad del Bronce con las navetas y, la edad del Hierro, con el talayot y estructuras asociadas.
La primera gran área, y más antigua, del yacimiento la podemos situar a mediados del segundo milenio a.C. en plena Edad del Bronce Balear. En ella encontramos varias construcciones familiares: las navetas. Los poblados de navetas se caracterizan por ser pequeños núcleos formados por pocas familias. La actividad principal de estas fue la agricultura y la ganadería. En S′Hospitalet Vell encontramos cuatro de estos edificios, en forma de nave invertida, todos ellos de diferentes dimensiones.
Si continuamos nuestro recorrido, llegaremos a la zona del talayot cuadrado, uno de los más singulares de la isla, puesto que además de su forma, también podemos observar un conjunto de losas situadas encima de su columna central, que lo hacen ser extraordinario. Posiblemente las losas conformarían una estructura para sustentar una segunda planta (ya que tenían función de vigas). Desde esta segunda planta se tendría un importante control del territorio, por encima de la llanura hasta llegar al mar.
Al talayot se unen una serie de edificios: una sala hipóstila y un conjunto de casas, que se extienden, cronológicamente, hasta el Periodo Balear y la posterior conquista romana de la isla. Es en esta zona del yacimiento arqueológico en Manacor donde también encontramos los restos de época islámica. Este hecho, como sucede en otros poblados, nos muestra cómo, a pesar de ser abandonados a principios del cambio de era, fueron continuamente frecuentados en varios periodos de tiempo, por encontrarse cerca de tierras fértiles y recursos hídricos.
En una tercera zona del poblado encontramos un gran edificio rectangular excepcional, una construcción que tiene un paramento externo de bloques ciclópeos perfectamente colocados. No se sabe muy bien la función del mismo, pero se cree que tendría un componente defensivo y de ostentación, donde se produciría el reclutamiento de tropas, los famosos honderos, que serían embarcados en dirección a alguna de las zonas de conflicto de la Mediterránea Occidental. |