El yacimiento arqueológico de Colmenares se encuentra muy cerca de Alicante y a 500 metros del Camino Viejo de Elche. El nombre le viene de estar junto a la sierra de Colmenares, sierra que marca uno de los límites del campo de Alicante con el campo de Elche. El yacimiento es un edificio aislado de tres habitaciones y algo más de 17 metros de largo. Se cree que el edificio estaba destinado a labores agrícolas. Ahora se encuentra en medio de una serie de campos de labor abandonados.
Seguramente en el siglo IV a.C., que es cuando se ha datado el edificio por la cerámica que allí ha aparecido, era un centro de almacenaje de ocupación provisional y ligado a la explotación agrícola del entorno. Una hipótesis muy sugerente, ideada por la doctora Feliciana Salas, aboga por la posibilidad de que en este edificio se realizarán trabajos con colmenas de abejas lo que nos llevaría también al nombre de la sierra: Colmenares.
Los arqueólogos que estudiaron el edificio destacan la singularidad de que el edificio ibérico Agrícola de Colmenares se encontraba aislado, sin ningún tipo de defensa, alejado de las ciudades ibéricas más cercanas: el Cerro de las Balsas en Alicante y La Alcudia y la moleta en Elche. Ello llevaría, a la hipótesis, de que en esa época, en el siglo IV a.C., periodo de máxima expansión y poder ibérico, había cierta estabilidad en la zona y probablemente una comunión de intereses entre estos grandes poblados ibéricos que controlaban la zona, lo que hacía innecesaria la fortificación de las instalaciones que explotaban las riquezas agrícolas del entorno. |