LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

NECRÓPOLIS DE GANDUL

La Necrópolis de Gandul se encuentra en el término municipal de Alcalá de Guadaira en la zona de los Alcores y las Canteras muy cercano a la autovía A-92. La Necrópolis junto a la Meseta de Gandul, forma parte de los orígenes de la población alcalareña. Sus primeros asentamientos, datan desde la época del Calcolitico hasta la época romana y se asientan sobre unos terrenos propiedad del Marques de Gandul. Aquí se encuentra una pequeña meseta o "Mesa de Gandul" como la llaman los lugareños y arqueólogos. Es aquí donde se constatan, con los restos encontrados el mayor asentamiento humano de la zona. De hace 4.000 años a.C.

Los enterramientos se sitúan en el perímetro al norte de la Mesa de Gandul, que probablemente en época Calcolítica ya era un importante poblado amurallado dedicado a la producción agrícola y la transformación de minerales. Al no haberse realizado casi ninguna excavación en La Mesa, desconocemos el tamaño y características del poblado, pero los enterramientos que lo rodean nos indican esta importancia, y lo relacionan con la cultura Calcolítica que se extiende por las márgenes del bajo Guadalquivir.

Los enterramientos calcolíticos de Gandul se clasifican como "megalíticos", por el empleo en su construcción de grandes losas de piedra, que revestían las paredes y cubrían sus techos. Pero lo más característico de estos enterramientos es su forma: largos corredores excavados en la roca alcoriza, generalmente terminados en cámaras circulares. Es por ello que también se conocen como "tumbas de corredor".

Hasta la fecha todas las tumbas excavadas habían sido expoliadas a lo largo de la Historia, por lo que no se ha encontrado ninguna intacta. Sin embargo, por paralelos con otras necrópolis similares (en el Aljarafe, la Sierra Norte y Extremadura) sabemos cómo se enterraba hace cinco mil años. La mayor parte de estas tumbas son enterramientos colectivos, que comenzaban por la cámara y continuaban a lo largo del corredor. Las tumbas de Gandul son más pequeñas que otras conocidas en el Aljarafe o en la zona de Antequera, pero aun así pudieron albergar decenas de enterramientos. Posiblemente cada tumba se correspondía con un grupo familiar, pero esto es algo que no podemos asegurar.

Junto con los cadáveres se depositaba un ajuar, compuesto por puntas de flecha, adornos de cobre y oro y recipientes cerámicos. En algunas de las tumbas calcolíticas de Gandul (y en otras de Los Alcores) se pudieron recuperar fragmentos de esta cerámica, denominada "campaniforme" por la forma acampanada de los bordes.

Actualmente, el número de enterramientos "de corredor" es relativamente elevado. Destacan la Cueva del Vaquero y el Tholos de Las Canteras, el Dolmen del Término, parcialmente destruido por un particular en el año 1998 y restaurado en el 2000. Otros enterramientos se localizan en las inmediaciones: Cañada Honda, La Casilla, El Pedrejón... Todos ellos en conjunto formaron un "paisaje funerario" perfectamente visible desde el poblado de La Mesa, estableciendo así un constante diálogo entre los vivos y los muertos, dentro del mundo ritual de la sociedad calcolítica.

La mesa de Gandul presenta una superposición de ciudades de distinta época. Está formada por una acumulación de restos y construcciones superpuestas de murallas probablemente del Bronce Final. Son abundantes los restos calcolíticos, tartésicos e íberos.

Las excavaciones han permitido demostrar la ocupación continuada del poblado desde el Calcolítico hasta el mundo romano. Comienza a poblarse a fines del III milenio a.C. Localizándose restos de viviendas con base de piedra dispuesta entorno a un hogar, se encontraron restos cerámicos y molinos de piedra e idolillos calcolóticos de grandes ojos similar al encontrado en el tholos de Las Canteras.

La ciudad romana se superpone al poblado íbero y calcolítico extendiéndose por toda la mesa permaneciendo en buena medida sin estudiar. Presenta una corona de villas de explotación agraria de gran entidad que estuvieron ocupadas desde época de Augusto hasta el s. IV.

Tanto en la Mesa como en las villaes se ha hallado restos de villas con abundante cerámica republicana e imperial (especialmente significativa es la terra sigilata), monedas, fragmentos de estatuas y mosaicos; de construcciones urbanas (cisternas, muros de casas y templos, capiteles, restos de una fuente en la vaguada norte de la Mesa; y de un posible anfiteatro situado al noroeste, entre la ciudad y el mausoleo circular.

En Gandul la necrópolis romana está adosada a los túmulos lo que indica una continuidad en el uso del territorio, al igual que la ciudad romana se superpone al poblado íbero y calcolítico.

El columbario, descubierto en 1982, del s. I, es un enterramiento turriforme cilíndrico de tradición muy antigua en el mundo romano. Tiene 8,20 m de diámetro compuesto por sillares trabajados en cuña rodeando una fosa circular excavada con una escalera de acceso y dos hileras de nichos de los que se conservan 15. Había sido saqueada parcialmente levantando parte de la cubierta y de los sillares de la pared circular. Se encontró una urna y varios vasos cerámicos y unguentarios de vidrio. A su alrededor, al igual que en los dólmenes, se localizan tumbas "satélite" cubiertas estas con tégulas dispuestas a dos aguas, una de las cuales sobresale del suelo al pie del muro circular.