La Lapa de Gargantáns está fechado entre el IV y mediados del III milenio a.C, adscrito a la época megalítica, situado en la parroquia de Gargantáns, en el municipio gallego de Moraña. Fue descubierto en 1958 y debido a sus características, únicas en Galicia, fue adoptado como icono predominante del escudo de Moraña.
Se trata de un monolito de 2,35 metros de los cuales sobresalen del suelo 1,92 metros de altura y 50 centímetros de diámetro, su forma es triangular cónica y su base, cuadrada, se encuentra cortada, por lo que es probable que su altura original fuese mayor. En su superficie hay grabados una veintena de cazoletas, junto a varias marcas en forma de ángulo y dos líneas serpenteantes.
La palabra "lapa", en gallego, entre otras acepciones designa a una piedra que señala un enterramiento, sin embargo su función exacta se desconoce, y algunos arqueólogos lo relacionan con signos funerarios, religiosos o conmemorativos, o antiguas lindes territoriales entre tribus.
El origen y la naturaleza de la piedra fue descubierta en el año 1958 por el maestro de la parroquia Don Carlos Paratcha Vázquez quién descubrió también otro posible menhir en el mismo concello conocido como la Cabeza de San Pedro que es un pequeño monolito con una enigmática y ruda cabeza grabada.
En el año 1980 el monumento fue levantado y trasladado de su lugar original aproximadamente unos 500 metros ya que antes del traslado servía de linde entre las parroquias de San Martiño de Gargantáns y Santa Xusta de Moraña. Esto obligó a realizar rápidos trabajos de arqueología que podrían indicar que el megalito fuera parte de uno más grande. |