LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

DOLMEN DE LA QUARANTENA II

La cueva-dolmen es un tipo de tumba prehistórica que aprovecha una cavidad natural de la roca para darle un uso funerario. La cueva conforma la cámara del megalito, que se cierra con paredes de piedra seca, y se completa con un corredor hecho con losas de piedra local que permite su acceso. Un tumulto frontal le acaba de dar la apariencia de dolmen.

Fue descubierta en 1999 y seguidamente se excavó y se restauró el corredor, el túmulo y el terraplén frontal. También se enderezó un menhir de gneis, de aspecto antropomorfo, que se encontró tumbado cerca de la entrada y que probablemente servía para señalizar la tumba.

Las cerámicas recuperadas del interior de la cueva documentaron un uso funerario de esta cueva más allá del neolítico. Un fragmento de una posible urna indica la utilización del megalito como tumba durante la Edad de Bronce final (alrededor del año 1000 a.C.) y las cerámicas medievales y modernas podrían indicar un uso más reciente como refugio de pastores.