La Mámoa do Rei, también llamada Mámoa de Trasmañó, Mámoa do Monte Vixiador, es un túmulo funerario construido hace 6.000 años en el monte Penide y próxima al parque forestal de Vixiador. Este es el único elemento señalizado de un total de 39 túmulos que componen la necrópolis de Monte Penide.
La Mámoa del Rey, es de dimensiones considerables, unos 25 metros de diámetro por más de 2 metros de altura. Un anillo perimetral de piedra delimita el montículo, protegido por una serie de piedras de mediano tamaño. En el centro se halla una anta o dolmen de corredor, conformada por catorce ortostatos verticales que sostienen las cuatro losas del techo.
La cámara, de planta poligonal está orientada hacia el este, mide unos tres metros de diámetro, y está cubierta por una enorme losa en la que hay talladas, en la cara superior, varias cazoletas. En el interior, muestra una decoración de líneas grabadas en zig zag y una figura en forma de cruz o antropomorfa. Conserva también restos de pintura. Conserva seis ortostatos, desplazado el de la cabecera que parece caído hacia el centro. El corredor se orienta al este, y mide unos tres metros de longitud. El montículo tiene un diámetro de 15 metros y una altura de aproximadamente 2,5 metros. En las excavaciones, aparecieron ídolos antropomorfos junto a la entrada.
El túmulo era conocido desde los años 50 tras las prospecciones realizadas en el Morrazo por el arqueólogo Ramón Sobrino Lorenzo-Ruza. Después, la mámoa sufrió un lamentable abandono y deterioro. En verano del 2001, una intervención arqueológica reconstruyó el monumento, reintegrando la losa que cubre la cámara, partida en dos, además de recuperar diversos materiales cerámicos y líticos. |