Dolmen de buen tamaño con evidencias de saqueo o profanación, probablemente muy antiguas, situado junto a un antiguo camino, paso habitual del Pirineo desde tiempos inmemoriales. Toda la zona está intensamente ocupada con innumerables manifestaciones de todas clases, restos evidentes de la intensa utilización del medio, donde en un espacio relativamente pequeño existen cientos de manifestaciones megalíticas, pastoriles, mineras, militares e industriales.

Este dolmen tiene un gran galgal en el cual se aprecian esparcidas 10 grandes losas que en su día cubrían la cámara del megalito, también conserva parte del peristalito que rodea el galgal. Tiene un diámetro de 16 m. con 2 m de alto y fue localizado en 1961 aunque no sabemos de excavación oficial alguna.