El Dolmen de Arrako es un monumento funerario del megalítico del tipo denominado de corredor, largo y abierto. Fue excavado en el año 1961.

Se trata de un sepulcro con cámara rectangular-trapezoidal formada por 7 losas (seis laterales, dispuestas tres a tres, y una de cierre, situada en la cabecera, con túmulo de unos 9 metros. Actualmente faltan las losas delanteras, que muy probablemente habrían sido aprovechadas en construcciones agropastoriles de las inmediaciones.

En el mismo centro, incrustada en el túmulo, se encuentra la cámara orientada hacia el sureste. Conserva perfectamente su estructura. Destaca la cubierta, una gran piedra de 5 metros de largo, dos de ancho y 65 centímetros de grueso.

Otra singularidad del dolmen de Arrako es el crómlech de 15 testigos, círculo de piedras hincadas, que rodea el monumento, seguramente añadido con posterioridad a la construcción del dolmen, ya que los crómlech datan del primer milenio de nuestra era, otra muestra de la sacralidad continuada del lugar.

En el interior del Dolmen de Arrako se han encontrado elementos como ajuar. Entre ellos puntas de flechas de silex, fragmentos de cintas de cobre, puntas lanceoladas de cobre y bronce, un gran colgante fabricado en un colmillo de jabalí, cuchillos de sílex, cuentas de piedra, botones de marfil de forma prismática triangular con perforación en V y una laminita de oro doblada como colgante.