LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

CUEVA DE SANTIÁN

La cueva de Santián fue descubierta en el año 1880 por el coronel Manuel Santiyán, de ahí que la cueva también sea conocida por dicho nombre (Santiyán), o incluso como la cueva de Los Señores ya que el propio descubridor acondicionó parcialmente la cueva para visitas que por aquel entonces estaban reservadas a personas de cierto estatus social.

Orientada al Suroeste, la cueva de Santián posee un desarrollo de unos 350 metros de longitud. Tiene dos bocas que en la década de los 50 fueron rebajadas para la comodidad de las visitas. Da acceso a un pequeño vestíbulo (también rebajado) que continua por una sinuosa galería que desemboca en una sala donde se encuentra el arte rupestre. Nuevamente nos encontramos con una estancia que fue rebajada donde además se construyeron escalones para adaptar el acceso. Desde aquí la cueva continua hasta un punto donde abundantes formaciones acaban por obstruirla.

De las investigaciones realizadas en los años 50, se ha podido constatar que el vestíbulo tenía un relleno de 1,5 metros de potencia formado por niveles arcillosos sin muchos materiales arqueológicos, si bien se halló un cráneo humano posiblemente perteneciente a la Prehistoria Reciente. En dicha intervención y en otros estudios aislados (posteriores) se han encontrado restos de talla y algunos útiles, un punzón de hueso, conchas perforadas y restos de fauna en abundancia, entre los que destaca la presencia de grandes carnívoros. Destaca la presencia en la cueva de afloraciones de silex, que es probable que fuese utilizado por sus antiguos moradores.

La cueva tiene pinturas rojas distribuidas en dos paneles de la sala central, la más espaciosa de la cavidad. Son pinturas lineales y en tinta plana representando signos, manchas y una dudosa mano en positivo. El primer panel se sitúa en un recodo de la pared derecha, a unos 15 m antes de la sala central. El panel principal se sitúa en una cornisa a 2 m de altura con una figura aislada enfrente. El primer panel tiene dos grandes manchas rojas y una posible mano en positivo. El panel central tiene 16 signos alargados formados por un trazo vertical con apéndices en la parte superior formando una especie de tridente. Enfrente aparece una figura de aspa simple. La cronología de las manifestaciones no está clara, ya que para Breuil son auriñacienses y para otros autores son más modernas. Lo atípico de las manifestaciones no permite más precisiones.