LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

CUEVA DE LAS PENAS

Conocida anteriormente como la cueva de Los Perros, se encuentra ubicada a menos de un kilómetro del núcleo urbano de Mortera. Su acceso actual se realiza a través de un pequeño hueco de unos 60 centímetros de alto por 1 metro de ancho. Posee unos 210 metros de desarrollo, de los cuales destaca una galería principal y un conjunto de otras más pequeñas que adquieren un carácter casi laberíntico. Para llegar a este punto hemos tenido que descender unos 15 metros desde la boca por una galería descendente y de estrechas dimensiones, encontrándonos finalmente con un piso inferior que tiene otra boca mucho más pequeña que la exterior. Sería cerca de este punto donde los investigadores hallaron los restos de un pequeño muro de mampostería que impedía el paso al interior. Fue descubierta en el año 2003.

Fruto de esas actuaciones aparecieron una serie de restos tanto humanos como materiales. Los restos humanos se localizaban exclusivamente en la zona interior de la cueva colocados directamente sobre suelo, sin presencia de fosa o zanja alguna y tras el citado muro que los encerraba. Los otros exponentes arqueológicos de la cueva de Las Penas son los objetos de adorno personal, concretamente un juego de 5 broches visigodos, restos de cuatro anillos, dos pendientes, una pequeña hacha, semillas de trigo, hojas de cuchillo, una cuenta de collar y un largo etc que nos transporta a finales del siglo VII - VIII d.C., en pleno apogeo hispano-visigodo.

En la cueva hay varios paneles de grabados, hasta nueve paneles, aunque uno haya sido considerado fruto de garrazos de animal. La mayor parte se encuentra en el fondo de la galería de entrada, de fácil recorrido, con la excepción del último situado más al interior, en una zona de más difícil acceso. Asimismo hay varios paneles del mismo tipo en la zona principal, generalmente trazos reducidos situados en las zonas altas, aunque hay también un panel formado por líneas muy visibles, que resulta característico del ciclo esquemático-abstracto. Los grabados, dejando a un lado el de posible origen animal, se distribuyen en tres paneles, que en el estudio de la cueva se han denominado panel 3, 6 y 9. El panel 3 se encuentra en una hornacina del techo a unos dos metros de altura. Está formado por multitud de líneas, unas con el trazo más bien ancho y romo infrapuestas a otras más finas. El panel 6 es muy grande y ocupa buena parte de la sala donde finaliza el piso superior, y se organiza en dos sectores de un metro cuadrado. Han sido realizados sobre la calcita arenosa cubierta por una fina película de decalcificación y trazados con dos instrumentos diferentes, uno duro y puntiagudo y otro más blando y romo. Está formado por líneas sin disposición organizada ocupando toda la superficie, en "horror vacui". Se ha individualizado con dudas una figura realizada en trazo ancho de una especie de cabeza de cabeza animal estrecha, orientada hacia arriba y dotada de algo similar a un pico alargado y romo. A esta posible figura y a otros grupos similares parece que se superponen los grupos de líneas más finas, de carácter caótico y aspecto de escobillados. Y por último el panel 9 segregado del resto se encuentra en una pared. Y se ha practicado con un instrumento romo que deja un surco ancho y poco profundo, con trazo muy seguro. Se trata de una figura de buen tamaño, trazada con cierto cuidado y que presenta correcciones de trazo, que no representa un motivo identificable. Está formado por varias líneas largas, alrededor de una oquedad natural, destacando sólo dos líneas paralelas.