LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

CUEVA DE EL PARPALLÓ

La Cueva del Parpalló se encuentra en el macizo de Mondúver, donde habitaron algunos de los primeros Homo sapiens que llegaron al Levante español. Destaca por ser el santuario prehistórico más importante de la región mediterránea peninsular. Aquí se encontraron más de 6.000 placas calizas grabadas y pintadas, el mayor conjunto de arte mueble de la prehistoria europea, muy lejos de cualquier otro yacimiento. La Cueva del Parpalló fue ocupada durante la mayor parte del Paleolítico superior. Los hallazgos más antiguos son de hace 29.000 años. La utilización de la cueva se prolonga durante miles de años, con intervalos de desocupación, hasta el Magdaleniense, hace más de 10.000 años.

La cueva es una gran grieta de 15 metros de alto por 4 de ancho que se abre en un afloramiento calizo en la solana de la sierra. Pertenece al municipio de Gandía, pero es la localidad de Barx la más cercana. No tiene mucha profundidad. La cueva fue utilizada como santuario por los antiguos pobladores de estos valles. No sólo las plaquetas decoradas con animales y motivos geométricos llevan a creer esto. La relación de la cueva con el sol es muy especial. En el solsticio de invierno y en los días anteriores y posteriores, el sol ilumina la zona más interna de la cueva unos minutos. Son las conclusiones de un estudio arqueoastronómico de la Universidad de Valencia. Este hecho da aún más singularidad a la Cueva del Parpalló. Es el yacimiento arqueológico más antiguo donde se ha podido demostrar la orientación astronómica no casual de un yacimiento arqueológico.

También este yacimiento fue un hito en la investigación arqueológica peninsular. Fue uno de los primeros estudiados con una metodología científica rigurosa. El yacimiento arqueológico fue descubierto por Vilanova y Piera en 1.866 y se excavó entre 1.929 y 1.933. Hasta 9 metros de potencia estratigráfica se sacaron a la luz en las excavaciones arqueológicas. Aparecieron en abundancia útiles prehistóricos realizados en sílex y hueso.

Destacable también son los restos humanos encontrados en la cueva. Especial relevancia tiene un cráneo de Homo sapiens que es uno de los restos de nuestra especie más antiguos y mejor conservados de los encontrados en la Comunidad Valenciana.

La fue lugar de reunión de las poblaciones y tribus de cazadores de toda esta región. Una hipótesis es que fuera lugar de intercambio de objetos, saberes, creencias e incluso gentes. Muchos prehistoriadores creen que en estos tiempos remotos las pequeñas tribus tenían lugares de reunión de clanes donde se acordaban enlaces entre hombres y mujeres de diferentes clanes para evitar la degeneración del cruce consanguíneo. Este pudo ser uno de los usos de la cueva pero no el único. A lo largo de los más de 15.000 años en que la Cueva del Parpalló también fue cueva de habitación de cazadores prehistóricos que la usaban como refugio temporal o como vivienda estacional durante su vida nómada persiguiendo las manadas sobre las que hacían presa. La ubicación de la cueva es privilegiada para la actividad cinegética. El gran dominio visual posibilitaba un mejor seguimiento de los movimientos de las presas. La fácil comunicación de esta zona montañosa con la llanura que lleva al mar ofrecía diferentes hábitats con posibilidad de obtener diferentes recursos (caballos en la llanura, cabras en los roquedos, jabalíes y ciervos en el bosque). Todo esto convertía a este lugar en idóneo para los grupos de cazadores paleolíticos. Desde aquí vigilaban los movimientos de caballos, ciervos, toros y cabras, animales que dejaron representados en las placas calizas que se encontraron en el interior de la cueva.