LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

CUEVA DE JORGE

La cueva de Jorge es una pequeña oquedad formada por una planta alargada de aproximadamente 5 metros de largo por 1 metro de ancho, producto de la acción kárstica ocurrida en la zona. La entrada se encuentra orientada al SE y las pinturas se pueden apreciar en un nicho y una pared lateral de la cueva. Se encuentra ubicado en la Sierra de la Palera, en el paraje de Los Almadenes, en las proximidades del embalse Alfonso XIII. Está fechada en el periodo Solutrense del Paleolítico, entre el 15.000 y el 14.500 a.C.

Las pinturas rupestres fueron descubiertas en 1993 formado dos pictografías realizadas con pincel:
∗ Figura 1. Es la silueta de un équido representado de perfil y mirando hacia la izquierda, de 27 cm. de alto por 45 cm. de longitud, en color anaranjado oscuro, cuyo estado de conservación se puede definir como bastante bueno, aunque en algunos lugares al pigmento le falta densidad. La figura se encuadra en un momento evolucionado del estilo III del Arte Paleolítico, al igual que representaciones de Puente Viesgo en Cantabria, La Pileta en Málaga o Parpalló en Gandía. Desde un punto de vista técnico se podría definir esta figura como un silueteado lineal, contando con proporcionalidad entre las distintas partes del cuerpo del animal, una línea cérvico-dorsal en S poco pronunciada, hocico en forma de pico de pato, quijada convexa, señalización de crinera pero sin escalón, dos orejas dispuestas hacia delante en forma de V poco abierta, ausencia de representación del desarrollo inferior de las extremidades, de líneas de despiece y de gravidez central. Se observan detalles que han llevado a los investigadores a plantear diversas hipótesis, como la posible representación de un ojo del animal, basándose en restos de pigmentos en la cabeza. Estos detalles se dan en ejemplos de otras cavidades como la fig. 2 del panel I de la Cueva de Ambrosio en Vélez-Blanco, Almería.

∗ Figura 2. Debido a la forma de los pigmentos se ha querido ver en ellos la representación de cornamentas de bóvidos, no obstante el mal estado de conservación hace que no se pueda asegurar. Se encuentra a 1 m. a la derecha de la pintura anterior y presenta el mismo color. Una colada o mancha negruzca la ha dividido en dos dejando a izquierda y derecha trazos sinuosos y horizontales.