El yacimiento se sitúa al norte del Valle de Sedano que ocupa la zona central de la unidad morfoestructural de las Parameras Serranas, definida como una superficie de erosión producida por el arrasamiento de los materiales terciarios. La cueva se localiza en un escarpe calcáreo situado sobre un cañón de la margen izquierda del río Ebro, concretamente en un farallón rocoso; presenta la peculiaridad y es objeto de estudio debido a que aquí se han localizado ejemplos de pintura rupestre esquemática (motivos lineales y un cuadrúpedo); con una datación entre el Neolítico y el Calcolítico.

La boca de la cueva es de unos 2 m. de alta por 1,5 m. de ancha penetrando hacia el interior unos 1,5 m aproximadamente. Las pinturas responden a la técnica del arte esquemático, los trazos son de color rojo y los temas representados son signos. Éstas se ubican en la pared derecha y en la del fondo, mientras que la de la izquierda no presenta ningún motivo, Los signos predominantes son líneas que forman ángulos agudos a modo de posibles flechas, otros son trazos horizontales y oblicuos que se distribuyen aparentemente sin orden por la superficie de las paredes. En esta cueva no han aparecido restos cerámicos ni óseos en superficie que puedan ser asociados a las pinturas. Todo el covacho es de roca natural y no presenta ningún tipo de sedimento. En los alrededores de la cueva tampoco se han visto otros indicios de interés.

Datos tomados de M. F. Anta Alonso.