La Cueva de Las Aguas en el pueblo de Novales del municipio cántabro de Alfoz de Lloredo, hoy en día está rodeada por una plantación de eucalipto. Al estar cerca de la cueva de Altamira (6 kilómetros en línea recta), se cree que los restos encontrados en ambas cuevas pueden estar relacionados. Se ubica dentro de un enorme abrigo, con la boca orientada al noreste. La entrada hacia las galerías se hace a través de un angosto pasaje. La cavidad termina en una colada estalagmítica fósil.
El arte rupestre está en la galería interior, seguramente se trata de conjuntos realizados en diferentes épocas. En la pared izquierda hay pinturas rojas, puntuaciones, un signo rectangular dudoso y algunas manchas. En un pequeño divertículo de la pared derecha se pueden ver dos bisontes hechos con tinta plana roja, con la cabeza grabada, la cabeza grabada de una cierva, un signo de tipo parrilla, un claviforme y algunas líneas rojas, en el entorno también hay manchas rojas y moradas. Una de los elementos decorados más originales de la cueva se encuentra en una concha fosilizada, aparecen la cabeza de una cierva grabada con línea estriada, la cabeza grabada de un caballo, manchas rojas y grabados lineales no figurativos. También se han encontrado algunas piezas de arte mueble, entre otras un contorno recortado de la cabeza de un caballo y una pieza discoidal.
Las representaciones pueden ser de hace entre 18.000 y 14.000 años, a lo largo del Solutrense y el Magdaleniense. |