LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

COVA BENEITO

Cova Beneito es uno de los yacimientos del Paleolítico más importantes de la Comunidad Valenciana, no sólo por ser uno de los escasos enclaves donde se ha documentado el Musteriense, cultura del Paleolítico medio, sino por haber dado una extraordinaria secuencia del Paleolítico Superior que cubre la mayoría de las fases de este periodo prehistórico.

Descubierta en 1.979 la cueva es de las mejor estudiadas no sólo de la arqueología de la Comunidad Valenciana, sino de toda España. Se han utilizado los medios técnicos y científicos más avanzados para extraer del yacimiento la historia de los primeros habitantes del El Comtat. Está todavía en estudio, por lo que está protegida por un vallado que permite no obstante la contemplación de la misma.

La cueva era antiguamente algo más profunda de lo que es en la actualidad, ya que hubo desprendimientos de la visera que protegía la entrada. Hoy tiene ocho metros de ancho por seis de profundidad. Orientada al O-SO está a 650 metros de altura. Los primeros ocupantes fueron los neandertales a finales del Paleolítico Medio, hace más de 40.000 años. Posteriormente, tras la desaparición de este primo cercano, nuestros ancestros ocuparon la cueva a lo largo de la mayor parte del Paleolítico Superior, hasta el periodo Solutreogravetiense, hace 16.000 años. Los miles de restos óseos encontrados, permiten seguir las preferencias cinegéticas de los ocupantes de Cova Beneito y vislumbrar el ecosistema que rodeaba el yacimiento. Ubicada en un lugar estratégico, de amplia visibilidad, controlaba varios territorios de caza. Por un lado el pasillo formado entre la sierra de Benicadell y Mariola, conocido hoy como estrecho de Agres, era una zona boscosa donde el ciervo debió ser abundante. La plana donde hoy está Muro, también vigilada desde la cueva, era una zona más abierta, donde las manadas de caballos constituían un buen aporte para la dieta de los habitantes de la cueva. Por último, el monte que rodea la cavidad, así como la sierra de Mariola, eran hábitat de cabras montesas que tampoco escaparon a la pericia de estos poderosos y hábiles cazadores. Como curiosidad el nombre de la cumbre de Mariola: Montcabrer, sin duda referido a la abundancia de cabras en el pasado. También han aparecido restos de otros animales, si bien en porcentajes muy inferiores a los caballos, ciervos y cabras, salvo el conejo que es consumido con frecuencia en el Paleolítico Superior. Destaca el rinoceronte de estepa, el lobo y el lince. De este último se han encontrado colmillos perforados que fueron utilizados como elementos de adorno, lo que hace pensar en su caza como forma de prestigio y el posible uso, hoy imposible de corroborar, de sus pieles en la indumentaria de los pobladores de la cueva. De adorno son también las conchas marinas que son prueba de acercamientos hasta la costa o bien producto de intercambios con otras comunidades. Si todo lo relacionado no fuera suficiente para valorar en su justa medida la importancia del yacimiento, en la Cova Beneito se constata la práctica de rituales funerarios en el Solutreogravetiense, hace más de 15.000 años. Al fondo de la cueva aparecieron dos cráneos humanos incompletos, correspondientes a una mujer adulta y a otro individuo, posiblemente un niño. Este es el enterramiento más antiguo de la provincia de Alicante encontrado hasta la fecha. Son muy pocos los restos humanos del Solutrense hallados en Europa Occidental. Es un enterramiento secundario, es decir, los cráneos fueron trasladados aquí tras su descarnación.