LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

CERRO DE El BÚ

El Cerro de El Bú es un promontorio situado en el lado izquierdo del río Tajo, frente a la ciudad de Toledo, en su lado este. Tiene dos fases de ocupación: una prehistórica (2.000 a.C.) y otra medieval (s. X). El lugar domina el río Tajo y claramente tiene un fundamento defensivo de control de paso del río, además sus tierras son fértiles y regadas por el arroyo de la Degollada que lo abraza desde la ladera sureste.

Ocupado inicialmente durante la Edad del Bronce y abandonado al final de este periodo, de esta fase se han descubierto estructuras de habitación y cabañas e incluso un hogar in situ. Se desarrollaba una economía eminentemente pastoril, con primacía del ganado ovino y vacuno. El cerro recuperó protagonismo en el periodo andalusí, cuando se levanta sobre él una fortificación, no demasiado grande, pero con dos recintos amurallados dotados de torres-contrafuertes, al poco de proclamarse el califato (siglo X). El final de este asentamiento árabe podría interpretarse como una destrucción intencionada, ya que aunque se encuentran niveles de ceniza, las murallas se habrían derrumbado antes de cualquier signo de incendio.

Los cimentos que se conservan en la ladera este del cerro están levantados con piedras de la zona (granito) y sujetas con tierra. Alrededor de los pequeños zócalos encontramos restos de los adobes que se han descompuesto con el paso de los años tras derrumbarse las cabañas, y que formaban parte de ellas. En la base del cerro aún se conservan muros que sirvieron para abancalar las laderas desde la base. Algunos de estos muros, que en ocasiones superan 1 m. de espesor, fueron aprovechados como paredes para las propias cabañas.

Los únicos restos de la ocupación bajomedieval del Cerro se han conservado en la muralla este.