LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

CASTRO DE CASTILVIEJO

El poblado de Castilviejo es un asentamiento humano de época celtibérica situado sobre un oppidum (zona elevada); las intervenciones realizadas han puesto de manifiesto la ocupación del cerro en diversos momentos, especialmente durante la Edad del Hierro I, celtibérico pleno y época islámica.

El poblado destaca por el sistema de defensas, compuesto por una muralla con varios codos y una torre, foso y friso de piedras hincadas o "caballos de Frisia". De hecho, es el primer lugar en el que se documentó este tipo de defensas contra la caballería al sur del Sistema Central.

El poblado, en el interior, tiene forma triangular con un eje mayor norte-sur de 85,56 m y un eje menor este-oeste de 60,80 m, su superficie total en la zona elevada, puesto que en las laderas también hay yacimiento es de 3.506,84 m². La muralla mide 80,02 m de largo por el interior y por el exterior, sin los acodamientos, mide igualmente 80,02 m y contando estos 97,19 m. El foso tiene unos 80 m de largo.

El "chevaux-de-frise", o sistema defensivo de piedras hincadas, se divide en dos zonas: la zona norte tiene una extensión de 819.06 m² y la zona sur 625 m². El pasillo central no es regular y su longitud es de unos 20 m mientras que su anchura oscila entre los 3 y los 4 m. La mayor singularidad del poblado consiste en la muralla en cremallera, única en España.