LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

CAMPAMENTO AQUIS QUEVQUENNIS

Aquis Querquennis, conocido coloquialmente como A cidá (en gallego "la ciudad"), es un complejo arqueológico romano formado por un campamento romano y una mansión-viaria, situado en la parroquia de Baños de Bande a orillas del río Limia en el embalse de las Conchas. El campamento se estableció en el lugar para la construcción de la Via XVIII o Via Nova, calzada que comunicaba Bracara Augusta y Asturica Augusta. Ocupado entre el último cuarto del siglo I hasta los años 20 del II. La mansión-viaria era un hospedaje de viajeros en la citada calzada, ocupada en los siglos II — III.

Las primeras prospecciones se realizaron en la década de 1920. En 1949 fue inundado bajo el embalse de las Conchas. A partir de 1975 se reanudaron las excavaciones centrándose especialmente en el cuadrante noroeste.

El campamento, que ocupaba una extensión de 2,5 hectáreas estaba rodeado por una muralla con forma rectangular y esquinas redondeadas. En la misma sobresalían torres defensivas cuadrangulares entre las puertas y en las esquinas. La muralla fue levantada con perpiaños pequeños de granito, unidos a hueso (encajados sin cemento), tenía 3,20 m de anchura y una altura próxima a 5 m., y estaba rematada por almenas semicilíndricas. El sistema defensivo poseía además un foso exterior con forma de V, con 5 metros de anchura y 3 m aproximadamente de fondo. Contaba con cuatro puertas monumentales, de las que se excavaron la Principalis Sinistra (puerta principal del lado izquierdo) y la Decumana, en el lado oeste. La Principalis contaba con dos huecos, uno de entrada y otro de salida. La Decumana era similar, pero con una única abertura. El sistema defensivo se completa con el intervallum de 11 m de anchura, un espacio de seguridad sin construcciones entre la muralla y la primera línea de edificaciones.

Se excavaron cinco barracones para a tropa o strigia, consistentes en alineaciones afrontadas en torno a un patio central, con una cisterna para recoger el agua de la lluvia. Las estancias o contubernia eran de tierra batida, estaban divididas en dos partes: espacio para dormir y los hogares. En cada una podían vivir ocho soldados. A la entrada de los barracones se encuentran unas bases circulares, que serían la parte de abajo de hornos comunitarios. Hay además en el campamento dos horrea o graneros rectangulares, que se elevarían sobre líneas de pilares de piedra y estaban delimitados por muros gruesos con contrafuertes externos. También se encontró un edificio de planta casi cuadrada, que sería el hospital o valetudinarium, consistente en varias estancias cuadradas alrededor de un patio central o compluvium. Es posible que este patio contase con un peristilo de columnas de madera asentadas sobre un muro bajo de piedra. También apareció un canal que conduciría las aguas del compluvium hacia el exterior del edificio.

El edificio central, que sería el cuartel general o principia tiene planta rectangular. En el encontramos un vestíbulo flanqueado por deambulatorios cubiertos y abiertos a la fachada. A continuación hay dos habitaciones pequeñas a ambos lados, que son los posibles armamentaria, donde guardarían las armas de uso no cotidiano. Luego se encuentra un patio rectangular grande con peristilos en tres de los lados, conocido como el foro. Después hay una basílica a la que se accede por una entrada central grande y dos laterales más estrechas. En el fondo estaría el área sacro-administrativa, con un templo oficial o aedes rodeado de cinco estancias, dos por el norte y tres por el sur, que pudieron ser el tabularium o archivo.

También se excavaron las letrinas, un edificio rectangular pegado a la muralla. En ellas se encuentra un canal de desagüe, una cloaca central ,y, un espacio en el cual se situarían unos bancos de madera o retretes, no conservados por ser originalmente de madera.

Fuera de la muralla, en el área más hacia el sur encontramos dos bases circulares pavimentadas con tégula, probablemente fuesen bases de hornos cerámicos, También aparecieron vestigios de una vivienda. En este lugar se asentaría un vicus o cannaba, que sería un pequeño poblado coetáneo al campamento.

Se cree que la unidad militar que ocupaba Aquis Querquennis fue la cohorte III, que dependía de la Legio VII Gémina, cuya base estaba en León, debido a que aparecieron marcas cerámicas sobre tégula que así lo confirman. Sería una unidad con 600 soldados de infantería y de caballería.

A escasos metros del campamento se encuentra la mansión-viaria. Sería la tercera desde Braga. En ella hay varias estancias, que se emplearían para hospedar a los viajeros que recorrían la vía romana y como cuadras para las caballerías. También se encontró un horno para cocer el pan y un pozo circular. Se conserva además un vestíbulo enlosado para acceder a la misma.

Muy cerca de la posada se encuentra una zona de aguas termales, conocida como O Baño. En ella hay varias piscinas y bañeras de piedra, que son vestigios de un balneario que funcionó hasta la construcción del citado embalse de las Conchas. En el lugar estarían las termas romanas, pero todavía no han sido excavadas.