LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

CALAGURRIS

Los restos arqueológicos más antiguos encontrados en la zona de Calahorra, corresponden al Paleolítico Medio, hace unos cincuenta mil años. Desde entones la presencia y actividad humana en la zona ha sido continua. En el siglo III - II a.C. destaca la ciudad celtíbera Kalakorikos que en el año 187 a.C. fue conquistada por los romanos.

El Yacimiento de Sorban está ubicado en el cerro de Sorbán, junto a los restos del acueducto. Se han hallado los restos de un poblado de la Primera Edad del Hierro en un periodo comprendido entre los siglos VIII y V a.C., que abarca cuatro momentos diferenciados entre sí.

La romana Calagurris, se situaría en la parte más alta e inaccesible del cerro que hoy ocupa el casco histórico, sobre una elevación próxima en la confluencia del Ebro y el Cidacos. Esta situación permitía el control de la vía natural de comunicación del valle del Ebro, y la explotación agrícola de sus fértiles llanuras.

El nombre latino era "Calagurris Iulia Nasica", Iulia por Julio César; y Nasica por Publio Cornelio Scipión Nasica. La época julio-claudia fue ciertamente esplendorosa para Calagurris pero no lo fue menos la época de los emperadores flavios.

Augusto tuvo una guardia personal de Calagurritanos. Se acuñaron monedas durante los reinados de Augusto y de Tiberio. Calahorra fue una de las ciudades privilegiadas con el superior rango de "municipium civium Romanorum", otorgando ciudadanía romana a sus habitantes. La ciudad se urbanizó siguiendo el modelo romano, circo, cloacas, murallas, termas, acueductos, puentes y posiblemente un anfiteatro.

El Circo discurría por el actual Paseo del Mercadal, entre las calles Paletillas y Teatro, el circo está datado en el siglo I, tenía una longitud de 360 metros y 80 de ancho. Las cárceles se localizan en la zona del Ayuntamiento, sólo conservándose a la vista parte de la cabecera semicircular norte, junto a la Matrona. Otros restos romanos se han hallado en el alfar de La Maja, se trata de cubiletes de cerámica de paredes finas, en los cuales se hace referencia de forma gráfica y escrita a los juegos celebrados en este lugar a comienzos del siglo I. También junto a los jardines de la Era Alta se han ido depositando diversos restos romanos, fustes y basas de columnas, prensas y grandes sillares, destaca un canal de desagüe del circo romano trasladado a éste lugar.