El conjunto de Racó de Nando está integrado por un total de 7 abrigos distribuidos a lo largo de un escarpe rocoso en forma de herradura, de unos 200 metros de desarrollo y orientado al sur en el margen izquierdo del río Montlleó, a su paso por el término municipal de Benassal. Se trata de un yacimiento descubierto en 1935. En 1974 se contabilizan un total de 23 motivos. La revisión realizada en 2019 ha permitido ampliar el número de motivos conservados a unos 60 restos pintados, que incluyen 19 figuras humanas, 11 representaciones de animales (5 jabalíes, 4 ciervos, 1 cáprido y 1 indeterminado) y 2 arcos, que originalmente debieron corresponder a figuras humanas hoy desaparecidas.

Varios grupos de pinturas se conservan en las diferentes cavidades del Racó de Nando. La más conocida de ellas es el abrigo VII, que es el que presenta las pictografías en mejor estado de conservación. En la parte izquierda del panel de esta pequeña cavidad, se puede observar un grupo de animales de apariencia un tanto extraña, podrían ser caballos, pero también recuerdan a jabalíes, que están siendo acosados por dos arqueros que se dirigen corriendo hacia ellos con el arco preparado para disparar. Tras el arquero de la derecha se observan restos de dos arqueros de pequeño tamaño. La escena debió ser de mayores dimensiones a juzgar por los restos de pigmento dispersos por el panel.