El Abrigo de Pinos se localiza en el término municipal de Benissa, en la sierra de La Solana, concretamente en el Morro de la Francesa y en la margen izquierda del Barranc de Creus o Barranc de la Tía Isabel a unos 25 m de la carretera local de Benissa a la partida de Pinos y situado a una altitud de 360 m.s.n.m. Se abre en las calizas dispuestas en forma de salientes o morros y se caracteriza por disponer de una longitud algo superior a los 200 metros, frente a una escasa profundidad y altura que oscilan entre 4 y 6 metros. Este gran abrigo está conformado por diversas covachas, teniendo la que alberga el conjunto de pinturas unas dimensiones de 3,5 m de largo y 6 m de profundidad y altura máxima. Quedan restos de un redil en el extremo derecho. Presenta grafitos modernos, pero las figuras neolíticas están contenidas en cuatro paneles:

PANEL 1. Superficie cubierta por una capa de concreciones calizas de tono blanquecino, eliminadas parcialmente en la intervención de limpieza. Altura sobre el nivel del suelo: 1,70 m. El panel consta de tres motivos de tipo esquemático, entre los cuales se identifica:
✱ 1.1. Posible figura humana con la cabeza marcada, sin indicación del cuello, los brazos abiertos hacia abajo, el tronco en forma de barra curvada en la parte superior, con un abultamiento en la inferior que podría indicar las nalgas, y las piernas abiertas en actitud de marcha hacia la derecha. Junto a la pierna izquierda se documentan restos de pigmento. Descrito como un antropomorfo en "phi" o un ídolo oculado.
✱ 1.2. Mancha alargada con morfología ojival de tipo esquemático. Del extremo izquierdo parte un trazo rectilíneo.
✱ 1.3. Posible antropomorfo muy esquematizado, con los extremos engrosados. Es posible que se trate de un motivo halteriforme. Ha sido descrito como antropomorfo en doble "Y" .

PANEL 2. Contiguo al panel I, hacia el oeste, y con una altura sobre el nivel del suelo de 2 m. Superficie lisa afectada por algunos desconchados.
✱ 2.1. Posible representación humana esquemática con cuerpo rectilíneo y sin indicación de la cabeza ni los brazos, si bien en el extremo superior presenta un ligero engrosamiento. Las piernas se representan abiertas, generando una morfología de "Y" invertida, si bien se encuentran afectadas por un desconchado. Una de ellas parece ser la prolongación del propio cuerpo, al encontrarse alineada con él.

PANEL 3. Superficie lisa de tonalidad rojiza afectada por desconchados. Altura sobre el nivel del suelo de 1,40 m.
✱ 3.1. a 3.4. Agrupación de cuatro figuras humanas esquemáticas conformando una escena. El cuerpo de todas ellas se representa con una barra alargada, afectada en la parte inferior por un desconchado. Las dos primeras son de mayor longitud y no conservan trazos que indiquen las piernas. Las dos siguientes, de menor tamaño, sí parecen conservar restos de las piernas abiertas. Las cabezas están indicadas mediante un ligero engrosamiento, del que parten dos trazos curvos a modo de cornamentas o un tocado. Los brazos se representan hacia abajo y se entrelazan, como si fueran cogidas de las manos.

PANEL 4. En la zona más occidental del abrigo. Superficie de color amarillento-rojizo afectada por capas de carbonato cálcico.
✱ 4.1. Delgada barra vertical de 1,4 cm de largo, más gruesa en la parte superior.
✱ 4.2. Pareja de zoomorfos de tipo levantino, parcialmente perdidos. Se trata de dos cérvidos de cuerpos listados enfrentados por sus cuartos traseros. El situado a la derecha está mejor conservado y en él se identifican las patas traseras, con el detalle de las pezuñas y la cola, el cuerpo y el cuello. Por debajo de una colada de carbonatos se ven restos de pintura de lo que serían las cabezas de ambos animales, que parecen girarse para encontrar sus miradas. En el de la izquierda se intuye el arranque de una cornamenta. Por debajo de ellas un trazo rectilíneo señala la existencia de, al menos, otra figura perdida.
✱ 4.3 a 4.5. A unos cincuenta centímetros de este conjunto, al oeste del panel, se localiza la que es, sin duda, la figura más emblemática de este yacimiento, la conocida como "Eva Pinera" o "Venus de Pinos" (4.4 inmortalizada hace 6.000 años). Se trata de una representación femenina levantina de pequeño tamaño en actitud sedente o inclinada hacia la derecha. Su cuerpo es estilizado y en él se identifican la cabeza de tendencia circular, los brazos en asa y el tronco alargado con los pechos indicados a modo de dos trazos paralelos. El engrosamiento existente entre las piernas parece señalar que lleva una falda como vestimenta, algo común en las mujeres de este tipo de arte. Junto a esta figura se documentan otras dos de tipo esquemático, una barra vertical (4.3) y una figura humana en forma de "Y" invertida con dos trazos transversales en la parte superior (4.5) que parece reproducir la actitud y la fisionomía de la citada "venus".