LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN ESPAÑA

ABRIGO DE LA LAGUNA DEL ARQUILLO

La estación rupestre se sitúa en el entorno inmediato de la laguna llamada del Arquillo, a unos 500 m al norte de la misma, en un estrechamiento natural entre peñas que existe en el cauce del arroyo homónimo, en la margen derecha. La cota de altitud a la que se encuentran las pinturas es de unos 970 m.s.n.m.

El frente rocoso en el que se localizan las pinturas está dividido realmente en tres grandes alvéolos. Hasta mediados del siglo XX este abrigo y otros colindantes estuvieron ocupados por casas semi-rupestres de campesinos. Hoy en día todavía se distinguen restos de muros anclados en el cingle, basamentos de construcciones en el suelo y vestigios de hornos y alacenas que aprovechaban los nichos y las oquedades abiertas en la roca.

Las representaciones ocupan toda la superficie útil del fondo de la cavidad formando un friso continuo de 0,60 m.

Abre el panel, por la izquierda, una magnífica representación de cervido que provisto de una cornamenta profusamente ramificada exhibe un buen tratamiento de las proporciones anatómicas. Orientado hacia la izquierda, manifiesta una clara actitud estática en la que no se insinúa movimiento alguno, como reseña el alineamiento en paralelo de sus extremidades. Muestra unas dimensiones de 18 cm de ancho y 25,2 cm de alto.

A escasos centímetros a su derecha vemos los restos de una figura de la que apenas se aprecian unos trazos verticales y un único trazo horizontal sin que queden otros restos alrededor que pudieran haber pertenecido en su origen a la figura. Recuerda mucho a aquellas figuras de arquero que sujetan en una de sus manos un manojo de vástagos de flecha, aunque esta propuesta resulta atrevida dada la falta de más evidencias. Mide 5 cm de ancho y 12 cm de alto.

El grupo más numeroso y compacto de figuras se encuentra a unos 20 cm a la derecha de la figura anterior. Abre el panel por la parte superior una representación de caprino de muy buena morfología como denota el correcto tratamiento de los volúmenes. Un trazo rectilíneo dispuesto sobre el dorso se interpreta como un venablo, dada su proximidad a la figura humana que parece ser un arquero. Mide 18 cm de ancho y 11,2 cm de alto. A su lado, por la derecha, se encuentra la citada figura de arquero mal conservada, se documenta parte de la cabeza, un solo brazo, la cintura escapular, bajo la que se desarrolla un tronco de trazado filiforme, y las dos piernas, apenas separadas. Aunque no se conserva resto alguno del supuesto arco el hecho de que tenga el brazo extendido hacia el frente, afrontado al caprino, y dada la presencia del trazo lineal clavado en el cuerpo de éste, hace pensar que se puede caracterizar a esta figura como la de un arquero. Mide 12 cm de alto.

Debajo de la figura humana se encuentran dos representaciones de animales de formas distintas a las hasta ahora vistas. Frente a los modelos cuidados del cérvido y el caprino descritos, en éstos se aprecian formas más descuidadas.